Zamora cuenta con 23 templos románicos en el término municipal, 14 de ellos están situados en el casco histórico lo cual ha convertido a Zamora en la ciudad con mayor número, mejor conservación y calidad de templos románicos en Europa.
Entre los templos de arte románico más destacados se encuentran:
La Iglesia de la Magdalena de la que destaca la fachada de su portada meridional.
San Juan, cuyo rosetón de "rueda de carro" se ha convertido en uno de los símbolos del románico zamorano.
San Cipriano, uno de los templos más antiguos de la ciudad.
San Pedro y San Ildefonso, donde reposan los restos de San Ildefonso y San Atilano, patronos de la ciudad y de la diócesis respectivamente.
Santa María la Nueva en la que se encuentra una pila bautismal de piedra tosca zamorana, con siete arcos labrados y grabados de figuras alegóricas que data del siglo XIII.
Santiago el Burgo, en la céntrica y transitada Calle Santa Clara, fue construida a finales de siglo XII, durante el reinado de Fernando I, con la reconstrucción de Zamora tras el destrozo ocasionado por Almanzor.
La foto aneja muestra La Catedral, del siglo XII, considerada el icono del románico zamorano. Aunque la más pequeña, es la más antigua de las once catedrales de Castilla-León. En el crucero se alza un cimborrio sobre el que se levanta una cúpula de gallones revestidos con escamas de piedra. De clara influencia bizantina constituye el símbolo de la ciudad.
Paseando por los márgenes de La Catedral nos topamos con el Parque del Castillo que nos lleva a los restos del Castillo de Zamora datado en origen en el siglo XI. Según se cree se ordenó construir por el Rey Fernando I. Paseando entre sus muros se puede disfrutar de las vistas que ofrece su privilegiado enclave.